En la costa de Galicia, donde el mar golpea con fuerza las rocas y el viento silba entre los acantilados, se alza un monte que impone respeto: O Monte Pindo. Conocido como el «Olimpo celta gallego», esta montaña ha sido durante siglos un lugar sagrado, cargado de simbolismo y misterio.
Y en sus entrañas, según la leyenda, duerme un ser ancestral: un dragón que no escupe fuego, pero guarda el alma misma de Galicia.
Un monte cargado de misterio
O Monte Pindo se eleva sobre el Atlántico, en plena Costa da Morte. Su silueta abrupta, con formaciones rocosas que recuerdan figuras humanas y animales, ha inspirado desde siempre respeto y fascinación.
- Se cree que fue lugar de culto en tiempos celtas
- Hay leyendas de bodas, milagros y desapariciones
- Algunos lo consideran un portal entre mundos
No es un monte cualquiera. Es un espacio sagrado, de los pocos que aún conservan su aura.

¿Quién es el dragón de O Monte Pindo?
No hay una única versión, pero todas coinciden en su esencia:
- Una criatura inmensa, con escamas oscuras y mirada brillante
- Habita en las grietas del monte, oculto bajo la roca
- Protege cuevas, fuentes y antiguos secretos
No es una bestia que ataque. Es un guardián. Solo actúa si el lugar sagrado es profanado o si alguien sube al monte con intenciones impuras.
Historias y leyendas del dragón
En las aldeas de Carnota y Ézaro se recogen testimonios como estos:
- Pastores que vieron luces danzando sobre las cumbres en noches de tormenta
- Montañeros que sintieron una presencia vigilante al caer la niebla
- Una familia que subió para buscar oro y tuvo que bajar de inmediato por un miedo inexplicable
El dragón no se muestra, pero se presiente. Como si la montaña misma respirara.

Simbolismo profundo del dragón
Este ser mitológico no representa el mal, como en la tradición cristiana. En Galicia, el dragón es:
- Espíritu protector de la naturaleza
- Advertencia frente al egoísmo humano
- Energía ancestral que habita en los lugares mágicos
Es el recordatorio de que no todo puede ser conquistado. Hay espacios que se respetan, no se dominan.
El Monte Pindo y su valor cultural
- Conserva restos de antiguas estructuras, dólmenes y petroglifos
- Tiene piedras con formas que recuerdan animales y humanos
- Fue centro de culto celta y posteriormente cristianizado
- Se considera uno de los puntos energéticos de Galicia
Hoy, es lugar de peregrinación, meditación y rutas naturales. Pero siempre bajo un mismo lema: subir con respeto.
Otros guardianes mágicos en la mitología gallega
- Los Gigantes de los Castros, que protegen fortalezas ocultas
- Los Mouros, que guardan tesoros bajo tierra
- Las Meigas Chuchonas, que castigan a quienes cruzan límites invisibles



El dragón de O Pindo está emparentado con todos ellos: figuras que observan y equilibran.
Interpretaciones modernas de la leyenda
Más allá del mito, el dragón es hoy:
- Símbolo de ecología: representa la naturaleza salvaje que no debe ser explotada
- Imagen de espiritualidad gallega: conexión sin intermediarios con el paisaje
- Fuente de inspiración para artistas, poetas y rutas de turismo mágico
No hace falta verlo. Basta con subir en silencio y dejarse envolver
Preguntas frecuentes sobre el dragón de O Monte Pindo
¿Se ha visto alguna vez al dragón?
No de forma física, pero hay testimonios de luces, sonidos y sensaciones fuertes al visitar el monte.
¿Tiene relación con dragones celtas o cristianos?
Tiene raíces celtas, como guardián de lugares de poder. No es demonizado como en la tradición cristiana.
¿Qué pasa si alguien sube con codicia o egoísmo?
Las leyendas dicen que se pierde, se desorienta o se siente observado. El dragón reacciona.
¿Por qué se respeta tanto esta leyenda?
Porque el monte impone. Y porque en Galicia, las historias que se siguen contando, siempre tienen algo de verdad.