Sopa Castellana

Hay días fríos en los que solo apetece una buena sopa caliente, y para mí, nada como una sopa castellana bien hecha. Con pan del día anterior, ajo, pimentón y un poco de jamón, este plato reconfortante lo tiene todo: sabor, sencillez y tradición. Es una receta humilde, pero con un resultado sabroso y lleno de matices, perfecta para cenas de invierno o como primer plato en una comida contundente.

Ingredientes

  • 4 dientes de ajo
  • 150 g de pan del día anterior (cortado en rebanadas finas)
  • 100 g de jamón serrano en taquitos
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • 1,5 litros de caldo de carne o agua
  • 4 huevos (opcional)
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal al gusto

Dificultad: Fácil
Tiempo estimado: 30 minutos

Receta paso a paso de la sopa castellana

  1. Dorar el ajo: En una cazuela con un buen chorro de aceite de oliva, dora los dientes de ajo laminados a fuego medio hasta que estén bien tostados pero sin quemarse.
  2. Incorporar el jamón: Añade los taquitos de jamón y sofríe un par de minutos para que suelten su sabor.
  3. Agregar el pimentón: Retira brevemente del fuego, añade el pimentón y remueve rápido para que no se queme.
  4. Incorporar el pan: Añade las rebanadas de pan y remueve bien para que se impregnen del sofrito.
  5. Añadir el caldo: Vuelve a poner la cazuela al fuego y añade el caldo caliente o el agua. Cocina todo junto durante unos 15-20 minutos, hasta que el pan esté bien deshecho.
  6. Huevos (opcional): Si quieres añadir huevos, casca uno por comensal y escálfalos en la sopa justo antes de servir, cocinándolos 3-4 minutos sin remover.

Información nutricional (aproximada por ración)

CaloríasProteínasGrasasHidratos de carbono
260 kcal12 g14 g20 g

Una receta perfecta para aprovechar pan duro y reconfortar cuerpo y alma en días fríos.

Sopas y platos calientes con alma tradicional

Sopa de ajo
La hermana gallega de la castellana. Pan, ajo, pimentón y huevo. Humilde y sabrosa, era la cena típica de muchas aldeas cuando apretaba el frío.

Caldo gallego
De grelos, fabas y unto, este clásico de cuchara se sirve bien caliente y acompaña las comidas de invierno con su sabor intenso y reconfortante.

Vieiras gratinadas con queso parmesano y pan rallado
Una opción más festiva, donde el pan se convierte en costra dorada. Crujientes por fuera, cremosas por dentro. Una delicia para abrir cualquier comida especial.

Origen e historia de la sopa castellana

La sopa castellana nace de la cocina de aprovechamiento, propia de las zonas rurales de Castilla. Con ingredientes sencillos como pan duro, ajo y pimentón, este plato se convirtió en una solución energética, económica y deliciosa que ha perdurado hasta hoy.

¿Sabías esto sobre la sopa castellana?

En algunas zonas, se sirve como desayuno durante las matanzas tradicionales, ya que ayuda a entrar en calor a primera hora y da energía para toda la jornada.

Qué tener en cuenta si es la primera vez que haces sopa castellana

  • No quemes el pimentón: Añádelo fuera del fuego para evitar que amargue.
  • Usa buen pan: Mejor si es rústico o gallego, para que mantenga textura.
  • El huevo es opcional: Aporta cremosidad, pero no es obligatorio.

Maridaje recomendado para la sopa castellana

Un vino tinto joven con cuerpo, una cerveza tostada o incluso una sidra natural encajan de maravilla con el carácter profundo y cálido de esta sopa.

Preguntas frecuentes

¿Se puede hacer con caldo vegetal?
Sí, aunque perderá parte del sabor intenso del caldo de carne.

¿Puedo usar chorizo en vez de jamón?
Sí, pero úsalo con moderación para no enmascarar el sabor del ajo y el pan.

¿Se puede congelar?
No es lo ideal, ya que el pan pierde su textura, pero es posible si no lleva huevo.