La anguila es uno de los pescados más tradicionales y singulares de la cocina gallega, especialmente en zonas como las marismas del Ulla o en la costa de Lugo. Su carne firme y sabrosa, ligeramente gelatinosa, ha sido durante siglos un manjar apreciado en hogares rurales y fiestas populares. Freírla es una de las formas más comunes y auténticas de prepararla, logrando una textura crujiente por fuera y jugosa por dentro. Es una receta directa, sencilla y llena de historia, ideal para quienes buscan sabores intensos y muy gallegos.
Ingredientes de anguila frita
- 1 kg de anguila limpia y cortada en trozos de unos 5 cm
- Harina de trigo para rebozar
- Sal gruesa
- Pimienta negra (opcional)
- Aceite de oliva suave o de girasol para freír
- Limón (opcional, para servir)
Dificultad: Media
Tiempo estimado de preparación: 30 minutos
Elaboración de anguila frita
- Lava bien los trozos de anguila y sécalos cuidadosamente con papel de cocina. Esto es fundamental para que el rebozado quede crujiente.
- Sazona con sal y, si lo deseas, un poco de pimienta negra molida.
- Reboza los trozos en harina, asegurándote de que queden bien cubiertos y sacude ligeramente el exceso.
- Calienta abundante aceite en una sartén profunda o freidora a fuego medio-alto. Cuando esté bien caliente, fríe la anguila por tandas, sin sobrecargar la sartén.
- Cocina cada trozo durante unos 4-5 minutos, hasta que estén dorados y crujientes por fuera. Escúrrelos sobre papel absorbente.
- Sirve al momento, acompañados de limón o una guarnición ligera.

Información nutricional y beneficios de anguila frita
Valores aproximados por cada 100 g de receta preparada:
Calorías | Proteínas | Grasas | Hidratos de carbono |
---|---|---|---|
240 kcal | 20 g | 15 g | 3 g |
La anguila es un pescado azul con un alto contenido en proteínas y grasas saludables, especialmente ácidos grasos omega 3. También aporta vitamina A, B12 y fósforo. Su carne es muy energética, por lo que resulta ideal para dietas que requieren un aporte calórico alto. Aunque se fríe, el uso de aceite de calidad y una cocción rápida permiten mantener su valor nutritivo.
Variantes populares de la receta
Anguila en salsa de ajo y laurel
Una versión más suave, en la que se cocina lentamente con ajo, laurel, vino blanco y un toque de pimentón. Ideal para acompañar con arroz blanco.
Anguila al horno
Menos habitual, pero muy sabrosa. Se cocina sobre una cama de cebolla y patata, con aceite y vino blanco. La piel se tuesta y la carne queda jugosa.
Origen e historia de la receta
La anguila ha sido un pescado clave en la alimentación tradicional de zonas como As Pontes, el entorno del río Ulla o las rías gallegas. Su captura era común en invierno, y en muchos hogares era parte de celebraciones, especialmente en tiempos de matanza o Navidad. Freírla era la manera más directa de prepararla, aprovechando el aceite caliente que también se usaba para otros fritos del día. Aunque su consumo ha disminuido, sigue siendo un producto con mucha tradición y un sabor que transporta a la Galicia más rural y auténtica.
Maridajes recomendados
- Un vino tinto joven gallego, como un Mencía fresco.
- Cachelos o patatas cocidas con aceite de oliva y pimentón.
- Ensalada verde con cebolla roja para contrastar.
Preguntas frecuentes sobre anguila frita
¿Es difícil limpiar la anguila?
Puede ser algo laborioso, ya que su piel es resbaladiza. Lo ideal es pedir en la pescadería que te la limpien y corten.
¿Es normal que suelte algo de gelatina al freír?
Sí, es una característica natural de la anguila. Esa gelatina ayuda a que quede jugosa por dentro y crujiente por fuera.
¿Se puede preparar con antelación?
Lo ideal es comerla recién frita, pero puedes recalentarla en horno unos minutos para recuperar parte del crujiente.