Nunca se me olvidará la primera vez que probé una flor de Carnaval: ese crujido fino y delicado, con un sabor que mezclaba la ligereza de la masa con el perfume del anís y la ralladura de limón. En mi aldea, era común ver a las mujeres calentando el molde en aceite con una precisión casi ceremonial. Las flores de Carnaval no son solo un postre, es una pieza de artesanía comestible que nos conecta con el Entroido más auténtico.
Ingredientes para las Flores de Carnaval
- 250 g de harina de trigo
- 3 huevos grandes
- 250 ml de leche entera
- 1 cucharada de azúcar
- Una pizca de sal
- Ralladura de 1 limón
- 30 ml de licor de anís (opcional)
- Aceite de girasol para freír
- Azúcar glas para espolvorear
Dificultad: Media
Tiempo estimado de preparación: 1 hora
Elaboración de las Flores de Carnaval
- Preparar la masa:
En un bol amplio, bate los huevos con el azúcar, la pizca de sal, la ralladura de limón y el licor de anís si lo usas. Añade la leche y mezcla bien. Incorpora la harina tamizada poco a poco, batiendo continuamente hasta que la mezcla quede lisa, sin grumos y con textura de masa ligera. Deja reposar unos 30 minutos para que la harina se hidrate bien. - Calentar el aceite y el molde:
Pon abundante aceite de girasol a calentar en una sartén honda. Introduce el molde de flores dentro del aceite y mantenlo al fuego hasta que esté muy caliente. Este paso es fundamental para que la masa se adhiera correctamente al molde. - Formar y freír las flores:
Saca el molde del aceite, escúrrelo un momento y sumérgelo en la masa sin que cubra del todo el borde superior. Llévalo inmediatamente al aceite caliente. Mantén el molde dentro del aceite hasta que la flor comience a soltarse; si no se desprende sola, ayúdate con cuidado usando un tenedor. Fríe por ambos lados hasta que esté dorada. - Escurrir y espolvorear:
Retira la flor y colócala sobre papel absorbente. Repite el proceso calentando el molde entre flor y flor. Cuando estén templadas, espolvorea generosamente con azúcar glas o una mezcla de azúcar y canela. - Servir:
Las flores son especialmente buenas el mismo día. Se sirven solas, crujientes, con un café o licor dulce, y siempre arrancan un «¡uhhh!» al primer bocado.
Consejos para unas Flores de Carnaval perfectas
- Temperatura del molde: debe estar muy caliente para que la masa se adhiera, pero no tanto como para que se queme.
- Rebozado correcto: no cubras completamente el molde con la masa o no se desprenderá.
- Sabor tradicional: el anís le da ese punto aromático de toda la vida, pero puedes cambiarlo por ralladura de naranja o vainilla si prefieres otro toque.
Información nutricional de las Flores de Carnaval
Este dulce es energético debido a su contenido en azúcares y al proceso de fritura, por lo que se recomienda disfrutarlo con moderación.
Valores aproximados por porción (una flor):
| Calorías | Proteínas | Grasas | Hidratos de carbono |
|---|---|---|---|
| 150 kcal | 3 g | 7 g | 18 g |
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Origen e historia de las Flores de Carnaval
Las flores de Carnaval, conocidas como flores de Entroido, tienen una larga tradición en Galicia. Su elaboración, siempre ligada a celebraciones como el Carnaval o fiestas patronales, requiere paciencia y el famoso molde de hierro que pasa de madres a hijas. Aunque su origen puede rastrearse en la repostería festiva europea, en Galicia se hicieron propias: crujientes, ligeras y con ese aroma que solo se consigue en nuestras cocinas.
Maridajes recomendados
Las flores maridan a la perfección con café de pota, licor café o un vino tostado. También combinan muy bien con un vaso de leche fría para los más pequeños, o con infusión de hierbas para quien prefiere un final suave.
Preguntas frecuentes sobre las Flores de Carnaval
¿Se puede hacer la masa con antelación?
Sí, puedes dejarla reposar en la nevera durante unas horas, pero recuerda batirla un poco antes de usarla.
¿Qué hago si la flor no se suelta del molde?
Es probable que el molde no esté lo suficientemente caliente o que la masa lo haya cubierto demasiado. Recalienta el molde y vuelve a intentarlo sin sumergirlo por completo.
¿Puedo guardarlas de un día para otro?
Sí, aunque lo ideal es consumirlas en el mismo día para que no pierdan el crujiente. Si te sobran, guárdalas en un recipiente hermético sin tapar del todo.
