Rapante frito

Muchas de las recetas de pescado que más se repiten en las casas de costa nacen así: sin grandes planes, con un rapante fresco y aceite caliente. En mi casa, cuando lo había, se freía entero, sin adornos, con sal y harina, y el olor bastaba para que todo el mundo se acercara a la cocina. Su carne blanca, tierna, con ese punto justo de grasa, hacía que nunca sobrara ni uno. Es cocina gallega de verdad: directa, rápida y con sabor a mar sin disfraz.

Ingredientes de rapante frito

  • 4 rapantes medianos, limpios y sin cabeza
  • Harina de trigo para rebozar
  • Sal gruesa
  • Aceite de oliva suave o aceite de girasol para freír
  • Limón (opcional, para servir)

Dificultad: Baja
Tiempo estimado de preparación: 20 minutos

Elaboración de rapante frito

  1. Lava y seca bien los rapantes. Puedes dejarlos enteros o abiertos a la espalda, según tu preferencia o el tamaño del pescado.
  2. Añade sal gruesa al gusto y pásalos por harina, cubriéndolos bien por ambos lados y sacudiendo el exceso.
  3. En una sartén amplia, calienta abundante aceite a fuego medio-alto. Cuando esté bien caliente, fríe los rapantes por tandas para que no se amontonen, unos 3-4 minutos por cada lado.
  4. Deben quedar dorados por fuera pero jugosos por dentro. Retíralos y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  5. Sírvelos calientes, solos o con una rodaja de limón. Son ideales para acompañar con ensalada, pan gallego o patatas cocidas.
receta tradicional del rapante frito

Información nutricional y beneficios de rapante frito

Valores aproximados por cada 100 g de receta preparada:

CaloríasProteínasGrasasHidratos de carbono
195 kcal21 g9 g3 g

El rapante es un pescado blanco con bajo contenido en grasa y alto valor proteico. Aporta minerales como fósforo y magnesio, además de vitaminas del grupo B. Aunque la fritura eleva ligeramente las calorías, si se hace correctamente no absorbe demasiado aceite y conserva todo su sabor natural.

Variantes populares de la receta

Rapante o gallo en escabeche
Una forma tradicional de conservar este pescado durante varios días. Se fríe primero y luego se cubre con un escabeche de vinagre, ajo, laurel y aceite. El resultado es un plato sabroso y que mejora con el reposo. (Puedes encontrar esta receta también en Receta Gallega)

Rapante a la plancha
Más ligero, ideal para quienes buscan una preparación rápida y saludable. Solo sal, plancha caliente y vuelta y vuelta.

Origen e historia de la receta

En las lonjas gallegas, el rapante es un pescado habitual y muy valorado por su sabor suave y su textura fina. Freírlo ha sido desde siempre una de las formas más comunes de prepararlo, especialmente en las casas cercanas al mar, donde se cocina sin complicaciones, con aceite caliente y buen producto. Aunque muchas veces ha sido considerado un pescado humilde, en realidad tiene una calidad excelente y su sabor no necesita disfraces. El rapante frito es cocina gallega en estado puro: honesta, rápida y deliciosa.

Maridajes recomendados

  • Un Ribeiro blanco joven o un Albariño fresco.
  • Cachelos o patatas fritas caseras como guarnición.
  • Ensalada de tomate y cebolla o pimientos de Padrón.

Preguntas frecuentes sobre rapante frito

¿Se puede preparar con filetes de gallo?
Sí. Aunque lo tradicional es hacerlo con el pescado entero, los filetes son más cómodos y se cocinan aún más rápido.

¿Qué tipo de aceite es mejor para freírlo?
Puedes usar aceite de oliva suave o girasol. Lo importante es que el aceite esté bien caliente y no humee.

¿Cómo evitar que quede aceitoso?
Sécalo bien antes de freír, no sobrecargues la sartén y escúrrelo en papel absorbente justo al sacarlo del aceite.