Leche Frita

En casa, la leche frita era uno de esos postres que anunciaban que venía algo especial. Mi abuela la preparaba sobre todo en Semana Santa, pero también en domingos de invierno donde apetecía encender el fuego y llenar la cocina de aromas dulces. La textura cremosa por dentro y ese toque crujiente por fuera hacen de este postre una joya humilde pero deliciosa, muy nuestra.

Ingredientes para la Leche Frita

Para la crema:

  • 1 litro de leche entera
  • 150 g de azúcar
  • 100 g de maicena
  • 1 rama de canela
  • Cáscara de un limón (sin la parte blanca)
  • 1 vaina de vainilla o una cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
  • Una pizca de sal

Para el rebozado y fritura:

  • Harina de trigo (para rebozar)
  • 2 huevos batidos
  • Aceite de girasol o de oliva suave (para freír)

Espolvoreado y decoración:

  • Azúcar
  • Canela en polvo

Dificultad: Media
Tiempo estimado de preparación: 30 minutos (más el tiempo de enfriado)

Elaboración de la Leche Frita

  1. Infusionar la leche:
    Reserva un vaso de leche y vierte el resto en una cacerola. Añade la rama de canela, la cáscara de limón y la vaina de vainilla (si la usas). Calienta a fuego medio hasta que comience a hervir. Retira del fuego, tapa y deja reposar durante 10 minutos para que la leche se impregne de los aromas.
  2. Preparar la mezcla de maicena:
    En el vaso de leche reservado, disuelve la maicena junto con una pizca de sal, removiendo bien para evitar grumos.
  3. Combinar y cocinar:
    Retira la canela, la cáscara de limón y la vaina de vainilla de la leche infusionada. Añade el azúcar y mezcla hasta que se disuelva. Incorpora la mezcla de maicena y leche, removiendo constantemente. Vuelve a poner la cacerola a fuego medio-bajo y cocina sin dejar de remover hasta que la mezcla espese y adquiera una textura similar a unas natillas densas.
  4. Enfriar la crema:
    Vierte la crema en una fuente cuadrada o rectangular previamente humedecida o forrada con papel film, procurando que tenga un grosor de unos 2-3 cm. Alisa la superficie, cubre con papel film en contacto directo para evitar que se forme una costra y deja enfriar a temperatura ambiente. Luego, refrigera durante al menos 4 horas, o hasta que la crema esté bien cuajada.
  5. Cortar y rebozar:
    Una vez fría y firme, desmolda la crema y córtala en porciones cuadradas o rectangulares. Pasa cada porción primero por harina y luego por huevo batido, asegurándote de que queden bien cubiertas.
  6. Freír:
    Calienta abundante aceite en una sartén a fuego medio-alto. Fríe las porciones rebozadas en tandas, dorándolas por ambos lados. Una vez doradas, retíralas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  7. Servir:
    Mezcla azúcar con canela en polvo al gusto y espolvorea las porciones de leche frita aún calientes. Se pueden servir templadas o frías, según la preferencia.
Receta tradicional de la leche frita de toda la vida

Información nutricional de la Leche Frita

Este postre es energético debido a su contenido en azúcares y fritura, por lo que se recomienda disfrutarlo con moderación.

Valores aproximados por porción (100 g):

CaloríasProteínasGrasasHidratos de carbono
250 kcal5 g10 g35 g

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Origen e historia de la Leche Frita

La leche frita tiene una fuerte tradición en el norte peninsular, y en Galicia se preparaba sobre todo en épocas de festividad como el Entroido o la Semana Santa. Es un ejemplo perfecto de cómo la repostería popular transforma ingredientes humildes en auténticas delicias. Cada casa le da su toque, pero todas comparten ese mimo en la preparación que la convierte en un postre inolvidable.

Maridajes recomendados

La leche frita marida muy bien con un café recién hecho o una infusión suave, como la de menta o hierba luisa. También puede acompañarse con un vino dulce gallego o un licor café para una sobremesa completa.

Preguntas frecuentes sobre la Leche Frita

¿Se puede preparar la leche frita con antelación?
Sí, una vez frita y espolvoreada con azúcar y canela, aguanta bien en la nevera un par de días. Solo hay que sacarla unos minutos antes de servir.

¿Se puede congelar?
No se recomienda congelarla, ya que pierde su textura cremosa y el rebozado se humedece.

¿Cómo evitar que se deshaga al freírla?
Asegúrate de que la crema esté bien cuajada y fría antes de cortarla. El rebozado debe cubrir completamente cada pieza, y el aceite debe estar caliente, pero no humeante.